La Nueva Panamericana alcanza un 95% de avance: clave para la conexión vial en Mendoza

La Etapa II de la nueva traza de la Ruta Provincial N°82, conocida como “La Nueva Panamericana”, ya cuenta con un 95% de avance de obra, y se espera su finalización en el corto plazo. Este tramo conecta desde el Corredor del Oeste —a la altura de la rotonda de Chacras de Coria— hasta la rotonda de Gobernador Ortiz, y representa un corredor clave para la circulación hacia el oeste mendocino.

La obra, ejecutada por la empresa Paolini Hermanos, está prácticamente operativa. Ya se puede transitar en unos diez minutos, aunque aún se trabaja en la finalización de accesos, intercambiadores, carpeta asfáltica complementaria, y tareas de señalización horizontal y vertical. Los trabajos son coordinados por la Dirección Provincial de Vialidad (DPV), y financiados mediante un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por 80 millones de dólares.

Actualmente, se están finalizando los ramales de ingreso y egreso en sectores clave como Guardia Vieja y Besares, donde también se completa el empalme con colectoras. Además, se está colocando la capa final de asfalto, junto con la demarcación vial: líneas amarillas y blancas, ejes, señales horizontales y sendas peatonales.

El administrador de Vialidad, Osvaldo Romagnoli, explicó que los trabajos restantes están enfocados en infraestructura complementaria, como conexiones eléctricas, cartelería, iluminación y nexos de servicios, esenciales para garantizar la seguridad y funcionalidad de la traza.

La Etapa II tuvo un costo de 46.200 millones de pesos y se enmarca en un plan de desarrollo vial integral que continúa con la Etapa III, actualmente en ejecución. Este nuevo tramo abarca desde Gobernador Ortiz hasta los caracoles del túnel Cacheuta–Potrerillos, y contempla obras de ensanche de calzada, nuevos retornos con iluminación, paradas de colectivos, puente nuevo sobre el río Mendoza y la puesta en valor de la villa de Cacheuta.

Esta autopista no solo mejora la conectividad metropolitana y turística de la provincia, sino que forma parte de un eje estratégico para el desarrollo del oeste mendocino, integrando zonas residenciales, comerciales y recreativas con altos estándares de infraestructura vial.