La paralización de la obra pública afecta el desarrollo tecnológico y el mantenimiento de infraestructura
La falta de inversión en obra pública no solo impacta en el empleo profesional de los ingenieros, sino que genera un atraso en el desarrollo tecnológico y en el mantenimiento de infraestructura crítica, según alertó el ingeniero Hernán Alonso, titular del Distrito III del Colegio de Ingenieros de la Provincia de Buenos Aires, en una entrevista por el Día del Ingeniero.
Alonso señaló que, durante este año, la actividad profesional de la ingeniería se ha visto seriamente restringida, con una fuerte caída en la demanda del sector público y una concentración casi exclusiva en el ámbito privado. “La ausencia de obras medianas y de gran escala ha reducido significativamente las tareas de los profesionales. Los municipios hacen un gran esfuerzo, pero el alcance es limitado”, expresó.
El especialista remarcó que, sin una política estatal integral de obra pública, las intervenciones de provincias y municipios resultan insuficientes para sostener el desarrollo territorial. Afirmó que esta parálisis no solo frena nuevas obras, sino que compromete el mantenimiento de la infraestructura existente. “Esta situación está generando un atraso que, en el futuro, requerirá inversiones mucho mayores para recuperar condiciones básicas de operatividad, especialmente en rutas, colectoras, puentes y señalización”, advirtió.
Desde el Colegio de Ingenieros, vienen acompañando a municipios en audiencias públicas y relevamientos técnicos, con el objetivo de visibilizar la necesidad urgente de obras de mantenimiento. “No estamos hablando de megaproyectos. Hablamos de conservar lo que ya existe, lo cual es crítico en ciudades que crecen y exigen adaptación constante de sus infraestructuras”, agregó Alonso.
En cuanto al uso de nuevas tecnologías en la profesión, el ingeniero sostuvo que el abordaje de herramientas como la inteligencia artificial está siendo impulsado mediante capacitación técnica continua. “Buscamos acompañar a los matriculados en esta transición tecnológica. Las nuevas generaciones se adaptan con mayor naturalidad, pero hay una franja que necesita formación específica para integrarse a este nuevo escenario productivo”, indicó.
La ingeniería, subrayó Alonso, está intrínsecamente vinculada a la planificación, ejecución y conservación de obras públicas. Su exclusión del diseño y mantenimiento de infraestructura tiene consecuencias directas sobre la calidad de vida urbana y el desarrollo económico sostenible.
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